Recuerdo cuando vi el video del gorila por primera vez. Fue una
charla a la que me invitaron el año 2009 o 2010 en Santiago. No recuerdo la
temática de la charla, pero si recuerdo como el expositor pasó el video y el
grueso de los participantes, tal como cuentan en el libro, no vio al gorila. Para
quienes no han visto el experimento este es muy simple: se les solicita a las
personas que vean un video donde un grupo de personas juega basquetbol y
cuenten los pases que dan los jugadores. En la mitad del juego aparece un
gorila mientras los jugadores continúan jugando. Al concluir el video se le pide
a los observadores que cuenten lo que vieron y, la mayoría, sólo ve pases de
basquetbol y no ve para nada al gorila.
Y, a proposito también recuerdo, que
hace un tiempo atrás en Buenos Aires en un curso de coaching ejecutivo del que
participaba, el expositor nos mostró un power point lleno de figuras
geométricas, nos pidió que las contásemos y luego nos preguntó qué hora era.
Debo decir que nadie vio dicha información, la que estaba muy a la vista de
todos en un círculo, que contenía la hora.
Hasta ahora dichas experiencias eran
anecdóticas para mí y las interpretaba bajo el concepto de percepción
selectiva, es decir, como nuestra atención se enfoca en algunas cosas y deja de
percibir otras, a partir de las distinciones que tenemos, de las experiencias
que vivimos o del estado emocional en que nos encontramos. Desde una
perspectiva muy ingenua cualquiera de nosotros supone que la realidad está ahí
y la percibimos de manera completa. Sin embargo, si es que ello fuera así, sólo
percibimos algunas cosas y las demás no las vemos, somos muy ciegos
habitualmente.
Y parece que esta ceguera no se cura
nunca, ya que es imposible percibirlo todo, frente a lo cual podemos hacer, al
menos dos cosas, la primera darnos cuenta que ello es así y que somos
observadores limitados, incapaces de percibirlo todo, lo que nos debe llamar a
la humildad y alejarnos de la omnipotencia. La segunda, es una invitación al
aprendizaje, ya que en la medida que contamos con más distinciones o adoptamos
una actitud de mayor apertura nuestro mundo se amplía.
Últimamente, a partir del curso de The Art of Hosting que hice en Perú comencé
a relacionar el fenómeno con el enfoque apreciativo, es decir, que cuando ponemos
la atención en algo vemos sólo cosas relacionadas con aquello, por eso que
cuando nos enfocamos en defectos o debilidades eso es lo que vemos o que cuando
buscamos fortalezas u oportunidades ello es lo que empieza a aparecer. Por eso,
estoy convencido que el buen coach hace preguntas
que amplían las posibilidades, que lleva al coachee a observar lo que antes no
veía y con ello ampliar su mundo de oportunidades.
Es interesante el video del gorila pues
da pie a numerosas conversaciones. Los autores del libro se valen de esta
historia para hablar de las ilusiones o cegueras cotidianas: ceguera por falta
de atención, ilusión de la memoria, ilusión de confianza, ilusión de
conocimiento, ilusión de causa e ilusión de potencial. Definen ilusiones como
“creencias distorsionadas que tenemos acerca de nuestra mente, que no son
simplemente erróneas sino también peligrosas”. Esta ilusiones son persistentes,
aun cuando sepamos que ellas son defectuosas siguen siendo obstinadamente resistentes
al cambio. Afectan nuestro comportamiento todos los días.
Bajo el libro subyace una crítica
constante a la idea de inteligencia intuitiva, que las personas puedan hacer
conexiones instantáneas, rápidas, con pocos datos, las que los autores interpretan
derechamente como prejuicio, errores cognitivos o falta de mentalidad
científica. A mi juicio, según el MBTI los autores son
claramente de naturaleza “sensorial”, los datos son los que valen. A mi
entender la intuición es una poderosa herramienta o recurso que es importante
desarrollar, sin embargo, hay que reconocerles que muchas veces las personas
intuitivas se equivocan y, al no contar con datos, no tienen como contrastar
dichas intuiciones.
Veamos cada una de las ilusiones en
particular:
Ilusión de
la atención: Descrita a partir del experimento del gorila. No vemos algo porque
nuestra atención está puesta en otro lado. Nuestros recursos atencionales son
escasos y limitados por lo que no podemos hacer muchas cosas a la vez. Una conclusión
que se deriva es que hay que tener cuidado con manejar y atender el teléfono.
Ilusión de
la memoria:
Nuestra memoria es menos creíble de lo que solemos aceptar. Estamos llenos de
falsos recuerdos que adulteran la historia para hacerla coincidir con nuestros
deseos presentes, ya sea porque omitimos información, porque nos acordamos sólo
de lo que nos interesa o ajustamos la memoria para interpretarla acorde a lo
que vivimos en el presente.
Ilusión de
confianza:
Solemos considerar competentes a quienes se desenvuelven con confianza en un
dominio y, al revés, asociar con incompetencia a quienes se muestran
desconfiados. Esto puede ser un error grave, ya que nada indica que quien se
mueve con confianza y soltura sea más competente. Ejemplo: visitar al médico y
que diga algo así como “antes de darle un receta, permítame revisar el manual
de diagnósticos para ver si estoy en lo cierto”, lo cual puede ser muy prudente
y astuto de su parte y podría demostrar un alto profesionalismo v/s uno que
luego de escucharnos sólo unos minutos diga con gran confianza y seguridad, “tómese
este remedio y se va a mejorar”, lo que podría revelar improvisación,
incompetencia, falta de acuciosidad, más aún si se trata de alguna enfermedad
poco común. Recordar que este es el truco de muchos farsantes, estafadores y
timadores.
Ilusión de
conocimiento: Muchas veces las personas piensan que saben más de lo que saben. Esta ilusión
nos hace pensar que sabemos cómo funcionan los objetos comunes cuando en
realidad lo desconocemos y su influencia y sus consecuencias son aún mayores
cuando razonamos acerca de “sistemas complejos” los que tienen muchos
componentes que interactúan y su comportamiento general no puede determinarse
con facilidad simplemente sabiendo cómo se comportan las partes individuales. No
lo dice en el libro, pero parece que está hablando de economistas o políticos,
que muchas veces no tienen idea de los fenómenos complejos pero están
convencidos que saben.
Ilusión de
causa:
Confundir casualidad, accidente o correlación con causalidad. Este es el error
de quienes asocian vacunas con autismo y, dado su error, han conseguido que
niños mueran y poner en peligro a mucha gente con enfermedades controladas por
su descuido. No hay causalidad establecida entre una cosa y otra, sólo alguna
correlación anecdótica. Y que dos eventos ocurran al mismo tiempo no significa
que uno cause al otro, sólo significa que ocurren juntos, aunque nuestra mente
tiende a conectarlos y establecer una causalidad. No lo dice el libro pero esto
es lo que le sucede a la gente que va a los casinos, le reza a la máquina y la
máquina gana, luego, interpreta que rezarle es la causa de ganar y se dedica a
rezarle cada vez que va al casino aunque siga perdiendo.
Ilusión de
potencial:
Podemos aumentar nuestra inteligencia ya, solo despertemos el potencial no
utilizado porque parece que sólo usamos el 30% del cerebro. Estimule el
aprendizaje escuchando a Mozart, haciendo crucigramas o resolviendo sudoku. Dicen
los autores, pág. 220, que esta ilusión “nos lleva a pensar que en nuestro
cerebro existen vastos reservorios de capacidad mental desaprovechada, que está
a la espera de que accedamos a ella tan pronto como sepamos cómo”. Combina dos
creencias, “que debajo de la superficie la mente humana y el cerebro albergan
el potencial de tener un rendimiento mucho mayor, en una amplia variedad de
situaciones y contextos del que en general tenemos y, segundo, que este
potencial puede liberarse con simples técnicas que se implementan de modo fácil
y rápido”.
A partir de las “ilusiones” creamos
una interpretación del mundo y, a partir de dicha interpretación, actuamos en
el mundo, lo que nos puede crear dificultades y errores. Desde la perspectiva
del coaching dan lugar a buenas preguntas para hacer a nuestros coachees y,
desde ahí, ayudarles a hacer interpretaciones que les abran nuevas opciones.